Los Registros Akásicos son la conexión entre el Mundo de las Preguntas y el Mundo de las Respuestas. El Mundo del Recibir y el Mundo del Dar para la Kabbalah.
Los Registros Akásicos no se inscriben en las técnicas adivinatorias.
Entre vida y vida, partiendo de la base de la reencarnación, nosotros mismos elegimos lo que venimos a experimentar. Desde los vínculos, las situaciones, lo duro y lo agradable, los aprendizajes,
los regocijos.
Al nacer olvidamos por completo el plan de vida que nos pertenece. Los Registros nos permiten
acceder a él y saber si estamos avanzando por el camino previsto, si estamos haciendo de más o
de menos. Si lo que estamos viviendo es lo que corresponde o cómo podemos cumplir mejor con
ese Plan Divino en cuya creación intervenimos.
Por eso los Registros hablan del pasado…del presente…y del futuro …como posibilidades abiertas
solicitadas en nuestro menú, que si no tenemos presente que están para nosotros, tal vez, pasemos por delante sin degustarlas. Nos hablan de lo que está escrito en nuestro Libro de Vida, en
nuestra Alma, para darnos la posibilidad de elegir en conciencia.
Porque son nuestros Ángeles, Guías y Maestros quiénes eligen la información que nos hacen
llegar.
Y nadie mejor que ellos, sabe qué necesitamos saber para hacer
de nuestro paso por esta vida, un paso con sentido.
En una lectura la información de vidas pasadas puede o no ser relevante.

Lo que sí es relevante es la LIMPIEZA ENERGÉTICA del lugar. Esta se logra utilizando alquimia. Durante cada lectura y al final del día. De otra forma, existe el riesgo de llevarse con uno las tristezas e impurezas de quien se los leyó antes. Asimismo, esto asegura la pureza del canal y la vibración elevada de quiénes son invocados.

Una lectura de los Registros Akásicos moviliza, sana, nos ayuda a tomar resoluciones que permitan vivir en plenitud, en el pleno ejercicio del libre albedrío

CUANDO LA LUZ TOCA TU VIDA, TE CONVIERTES EN UNA FUENTE INAGOTABLE DE AMOR PARA TODOS AQUELLOS QUE TE RODEAN.

Sean todos bienvenidos, en Paz y Amor