No puedes encontrar paz evitando la vida
Hay momentos en los que salir de la cama cuesta. En que lavarse la cara y dar los primeros pasos parece eterno. En que cuando nuestros sentidos comienzan a funcionar nos recuerdan algo que nos duele, y que está ahí, al abrir la puerta.
No está al abrir la puerta. Está dentro tuyo. Hay que bucear a los propios inframundos para rescatar las partes oscuras. Tocar el barro con el dedo gordo del pie para luego empujar con fuerza, y acompañados de todos nuestros ángeles, pedir valor al cielo para ir hacia la Luz. Hoy es ese día.
Vístete para ti. Arréglate para ti. Siéntete luminosa por dentro y por fuera y haz de este día no un día de paz…sino un día de comenzar el fin de ese sufrimiento que te da una paz falsa.
Bendiciones valiente guerrera de Luz!!!
Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos