No necesariamente…
No necesariamente el plan original es el correcto. A veces hay que dejarle espacio al Universo para que haga su obra en Amor.
Quería visitar el único lugar en el mundo donde el Ministerio de Transportes y Obras Públicas, si quiere construir una carretera y se le informa que afectarán la casa de un elfo…modifican el recorrido de la carretera.
Pero pareciera ser que ir a Islandia no estaba en los planes mayores…porque intenté, intenté, y las fechas no cerraban, el dinero parecía que carecía de sentido y con firmeza se cerraba una alternativa tras otra.
Entonces sentí… y al sentir me di cuenta que mi lugar pendiente en el mundo es Escocia. Todo comenzó a fluir y me dejé llevar por la corriente de la vida.
Pensar, sentir, hacer es una danza interminable que requiere estar afinado con el sonido del Cosmos. Desde la actividad más sencilla hasta la más elaborada tiene un sentido que muchas veces, a primera vista, no comprendemos.
Mi alma quería ir a la fuente. Al lugar donde creen en Avalon. A las tierras altas de los escoceses, de sus leyendas, de sus mitos, de su valor.
Cuando la ola comienza a ponerse adversa, no vale la pena cansarse intentando modificar el rumbo. Simplemente hay que subirse, deslizarse, disfrutar. Todo tiene su tiempo. Un tiempo para llegar. Un tiempo para descansar. Un tiempo para gozar. Un tiempo para amar.
La sabiduría radica en saber que el tiempo lo creamos nosotros en sintonía con el Universo.
Bendiciones infinitas!
Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos