Blog - Nunca estamos solas

No hay un Gracias lo suficientemente grande que pueda abarcar lo bendecida que me han hecho sentir ayer, hoy y todos los días.

Mientras iba leyendo cada comentario, uniendo rostros con palabras, tantos que conozco personalmente, tantos otros en este lugar de encuentro, me sentí abrazada. Por miles de brazos que sin estar presentes en carne, lo estaban en espíritu.

Tener ganas de vivir es el ingrediente básico para que sucedan cosas en la vida. Buenas cosas. Malas cosas. Pero que sucedan.

Re- nacer es el milagro de despertar a la vida cada día. Sentirlo una oportunidad. Ponerle lo mejor. Aunque a veces no tengamos fuerzas.

Mientras leía, deseé tener varios pares de manos para contestar a todos y cada uno de los mensajes.

Cuando terminó el día, nuevamente encendí luz (decidí que a partir de ahora para celebrar no las soplo, las enciendo)y pedí para que en la vida de todos nosotros, de todos y cada uno, surja una llama de esperanza y de certeza. La de estar siempre acompañados. Ayer como nunca, tronó el “Nunca estamos solas” que lo vamos construyendo día tras día.

Vale la pena estar vivo.

Un 6 de noviembre, hace muchos años, cuando sentía que ya no podía más, entré en la Catedral, sin tener mucha idea de por qué. Simplemente incliné la cabeza y pedí “Por favor”. En ese momento se encendió una luz muy adentro, y todo lo que sucedía en mi vida siguió pasando. Pero lo comencé a vivir sin querer morirme,

Somos los dueños de nuestros pensamientos. Y nuestros pensamientos los que crean nuestra energía. La magia mayor es darle la verdadera trascendencia a cada cosa. Cambiar lo que podemos, y lo que no… dejar que tome su curso,

Bendiciones! Por acompañar en el camino con la presencia, el afecto y la sabiduría GRACIAS GRACIAS GRACIAS.

Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos