Blog - Nunca estamos solas

El mes que quieras y sientas

Diciembre, da inicio a una carrera infructuosa contra el tiempo.
Ver a amigos que no vi en todo el año, pero parece que fuera imperioso encontrarse. Cumplir con reuniones . Conciliar sobre donde pasar la Nochebuena, la Navidad, Fin de año y Año Nuevo.

Tiempo de negociaciones…si con tu familia, con la mía, con amigos. Que si íntimo o multitudinario, Que si cordero, si en casa o en restaurante. Lo banal se vuelve trascendente y lo importante se nos olvida, tantas veces…

Diciembre es un mes como todos los otros con una cuota de estrés extra. Y sensación de que algo va a terminar y cambiar. Algo que no se ve, pero se siente, y se teme, sin saber bien por qué. Ansiedad llevada al paroxismo.
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Diciembre, quiero vivirte como un viaje interno de gratitud. Por las personas, las situaciones, los aprendizajes. Agradecer lo cotidiano. Conectar con mis emociones.

No hay ninguna carrera.
No llego tarde a ningún lado.
No quiero hacer para cumplir. Sino sentir lo que hago.

El examen estrella de la vida. El año entero. Así lo siento. Mil veces repetí que el instante presente es lo que vale. Que lo de afuera importa poco. Que lo importante viene de adentro. Que depende de nosotras. Pero ahora es carne, no palabras. Que no se lleva el viento.

No me exijo en el momento del año en que elijo quererme.
Sabemos decir Sí con ganas, y No con fuerza.
Hagamos lo que sintamos!

Caminar el doble, respirar profundo, tomar bastante líquido, escuchar lo que el cuerpo dice, mirarme en todas las áreas de la vida

Feliz mes de diciembre…ese que desees vivir y construir.
Que lo vivas con tus «debo» y tus «quiero» reconciliados.

Diciembre. Acá estamos. Con lo que queda de fuerza.
Si algo aprendimos, es que somos valientes, luchadoras, guerreras, amorosas, fogosas y con garra.
Capaces, perseverantes, sabedoras de que podemos y merecemos.
Así que diciembre, acá te esperamos.
Viviendo. A tope. A todo rock.
Como lo hicimos todo el año.
Hasta cuando creímos que no dábamos más y no podríamos seguir.

Merecemos!

Escrito por Simone Seija
La Psi que leo Registros Akásicos


Gracias por estar ahí. Por ser las que son.

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