Blog - Nunca estamos solas

Decir lo reprimido, sin herir, sin herirme, sin arrepentirme

Hay un movimiento en el cielo que me convoca. Lilith entra en Géminis. Lilith, la luna negra, es como la cara oscura de la luna. Son nuestras debilidades, contradicciones, nuestro talón de Aquiles, lo que nos hace reaccionar, nuestra forma de compensar, nuestras fascinaciones, nuestros miedos. Es una herramienta de conocimiento personal.
Lilith tiene que ver con nuestra reactividad. Cuando somos reactivas, no pensamos, actuamos desde el impulso. Tememos tanto a nuestros impulsos, que optamos por callar cosas. O, no podemos controlarnos, y las largamos de cualquier manera. Arrepintiéndonos a los cinco minutos. “Porque dije lo que dije como lo dije, oh my God!”.
Pues la luna negra en Géminis, nos da la posibilidad de hablar desde un lugar diferente. A ser conscientes de lo que nos hace mal, y a elegir la forma en que lo vamos a comunicar.
¿Cómo puedo decir lo que tengo reprimido de una manera no violenta, ni con vergüenza, ni con miedo, ni con ira, ni con frustración?
Intentando ir al encuentro con el otro, y no al choque. Estamos entrando a la toma de conciencia de lo femenino oculto. Del Deseo de expresarnos. A la sabiduría y comprensión de que puedo usar mis palabras de una forma constructiva o destructiva.
Estos decires tienen que ver con temas que nos afectan. Con lo que callamos durante mucho tiempo. Con lo que duele, ha dolido y parece que fuera a seguir doliendo. Es encontrarse en situaciones donde elegir “aguantar calladita”, o decirlo desde un lugar interno de seguridad y buen amor. Por una misma y por el otro. Decir lo que está dañando, para que no dañe, sin dañar, ni dañarme. Qué buen rock!

Escrito por Simone Seija
Soy la Psi que leo Registros Akásicos
y amo lo que hago

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