A veces parece que…
A veces parece que no sucede nada
Acostumbrada a una vida de montañas rusas, de abrir los ojos cada día enfrentando un drama diferente, estar en paz me resulta tan extraño como tener rulos en el pelo.
Me detengo en la palabra drama. Sacar el drama de los vínculos y las situaciones, permite vivir con otra paz aún similares circunstancias.
Darse permiso para que las cosas no sean perfectas y no por eso sofocarse.
Tomar descansos antes de llegar al agotamiento.
Disfrutar de la tranquilidad sin necesidad de nutrirse de inclemencias existenciales.
Cada pequeño movimiento contribuye a la paz del alma.
A veces parece que no sucede nada. Y es cuando parece que estamos en la nada, que se dan los movimientos más profundos. Justo entre tormenta y tormenta. Los movimientos más reales, duraderos. Esos que no se ven, pero sentimos como oleadas intensas en el cuerpo.
La nada bien aprovechada se vuelve el todo más pleno.
Bendiciones!Buen fin de semana!
Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos